Rafa es el otro. Al de Peñafiel se le buscará una cesión, pero se pretende que sea en un equipo de Segunda División. Otro que puede salir es Carreño, al que el Eibar pretende como moneda de cambio para permitir que Íñigo recale en el Valladolid.
Respecto a los descartes oficiales del club (Losada, Robles, Figueredo y Lledó), el Valladolid asegura que se ha hablado con ellos y sus representantes, y saben que tendrán que agilizar su traspaso o cesión a otros equipos. Algunos de ellos han tenido ofertas, pero de equipos de menor categoría, por lo que han preferido esperar.
(Fuente: El Norte de Castilla)